La minería ha contado con un aliado volador desde sus inicios, los trabajadores solían llevar un canario con ellos para usarlo como alerta, ya que puede resultar una profesión con altos riesgos de derrumbes repentinos, inundaciones o fugas de gases tóxicos. Actualmente, la industria minera cuenta con un nuevo elemento volador que los ayuda a realizar su trabajo de forma más segura.
Explora, mapea e inspecciona minas usando drones
Estamos acostumbrados a ver drones en el cielo, pero recientemente esta tecnología se ha estado utilizando para ayudar a explorar, mapear e inspeccionar los pozos mineros subterráneos. Emesent, una start-up australiana especializada en tecnología, ha creado una solución llamada Hovermap que permite que los drones naveguen de forma autónoma en espacios pequeños y obscuros, aun cuando no haya red GPS disponible.
Utiliza la tecnología LIDAR (sistema de detección de luz y detección de rangos de imágenes) para detectar y mapear lo que le rodea, creando modelos 3D con bastantes datos, que pueden ser utilizados posteriormente para monitorear la integridad estructural de estas áreas.
Escaneo autónomo en el dron
En la extracción de minerales, las empresas utilizan frecuentemente una técnica llamada “suspensión”, para obtener materiales preciosos. Los huecos subterráneos conocidos como “topes” son creados mediante la detonación del cuerpo mineral y la extracción de la roca fragmentada. Los topes necesitan ser escaneados para asegurarse de que no queden minerales valiosos en el suelo y para verificar si no se extrajo material erróneo que diluya la calidad del mineral.
Escanear las paredes es actualmente una tarea peligrosa, ya que el equipo necesita operar cerca de la entrada de los topes, siendo esta la parte con mayor riesgo de derrumbe. Al enviar el dron autónomo habilitado conHovermap, el equipo se puede mantener a una distancia segura, sin ponerse en riesgo.
Mejorando la seguridad en las minas
“Hovermap le permite a la industria minera inspeccionar de manera segura áreas inaccesibles de minas subterráneas, al mismo tiempo que mejora el tipo y la calidad de los datos recopilados para desbloquear conocimiento nuevo”, mencionó el Dr. Stefan Hrabar, Co-fundador y CEO de Emesent.
“Esto incluye conciliaciones de las paredes para verificar si fue la explosión se realizó de acuerdo al plan y para calcular el volumen del tope. La nube de puntos 3D producida por Hovermap contiene tantos detalles que también se pueden utilizar para detectar estructuras geológicas como planos fracturados”. Estos planos fracturados pueden ser puntos de debilidad, difíciles de detectar a simple vista, pero que son propensos a colapsar peligrosamente. “Nuestros escáneres proporcionan a los ingenieros geotécnicos una mejor comprensión de las condiciones de la roca que se encuentra en la mina, lo que les permite mejorar la seguridad de la operación minera al diseñar un soporte apropiado del suelo”.
Al montar un dron compatible, Hovermap utiliza datos del sensor LIDAR, para habilitar funciones de mapeo y autonomía avanzada. La tecnología que hace esto posible es la localización y asignación simultáneas (SLAM, por sus siglas en inglés).
SLAM le permite al dron navegar y mapear un espacio al mismo tiempo, mientras evita derrumbes, sin importar si no hay información preexistente de dicho espacio. “Un dron autónomo habilitado con Hovermap puede obtener resultados de alta calidad al realizar un mapeo en áreas complejas y peligrosas y a la vez se asegura de no perder el conocimiento de su ubicación o su habilidad para regresar de manera segura”, mencionó Hrbar.
El uso de tecnología avanzada en respuesta a situaciones de emergencia
La tecnología central de Hovermap fue inicialmente desarrollada por los fundadores de la empresa, mientras trabajaban con la Organización Australiana de Investigación Científica e Industrial (CSIRO, por sus siglas en inglés). Un equipo en conjunto de CSIRO y Emesent fue seleccionado recientemente para participar en un proyecto subterráneo de la Agencia de Proyectos Avanzados de la Defensa de Estados Unidos (DARPA, por sus siglas en inglés), en el cual tiene como objetivo desarrollar tecnologías innovadoras para mapear, navegar y buscar en ambientes subterráneos rápidamente.
En el 2004 DARPA, con su “Grand Challenge” ayudó a crear la industria de los automóviles que se manejan de forma autónoma y fue pionero en el uso de LIDAR para la navegación autónoma. La meta de este nuevo reto es encontrar las herramientas y técnicas que puedan ser utilizadas en servicios de emergencia que trabajan en situaciones subterráneas. El equipo ganador puede proporcionar un impulso a los esfuerzos humanitarios y llevar a casa un premio de 2 millones de dólares.